Balla la Lluna

Illa de lluna
que brilles amb gràcia
en un cor floral
i habites en el llac
dels sentits
amb la calma nit.

Balles safirs blavosos
sobre el fresc sostre
en la meua templa estrellada
i dorms en els meus ulls
quan aromes
el teu apoteòsic sentir.

Vuela

Vuela, hazlo ya garza
con tus aires de grandeza,
como aquella picotuda
ave aguilada
que esconde su raíz
untada de mieles,
la que se relame
bajo las sombras
de sombríos atardeceres,
la que recuenta fases
en ir naciendo turbia
con vastos sueños irreales,
la que planea intereses
sobre las frías noches
y en cada asomo de sol.

Vuela, que sea alto,
como dejaste en el viaje
los derrames en el viento,
las palabras sin crono,
los suspiros irracionales
y la necesidad del vicio
de atracar sin puerto.

Vuela, hazlo con libertad
surcando el ingenuo cielo,
cual fiel otorga el ego
sobre la suspensión
del planeo celeste.

Vuela, vuela el mañana
que pierde el surco de hoy
con alas embrujadas
y desde este pasado
tan fugaz y presente.

Mi café

Tú,

silueta perfecta
que vives
la pasión
estimulante
en los placeres
de mil vidas.

Vagando vas
el tiempo
hipnotizando
en cada sorbo,
y cerrando los ojos
derrotados
en los equilibrios
pendulares
de tu éxtasis.

Aroma de mundo.
Viajero sumido
con sabor a tí.

Tuve.

Tuve que aprender
a caminar
entre los zarzales
de tus contagios,
quedar ciego,
nadar a contracorriente,
volar sin alas
luchando
contra los vientos
de tus mareas.

Tuve,
tuve que ser aquel
yo sin mí,
y aún hoy;
duele el silencio
que apostilla
tiempos pasados
en el valle
de los seres perdidos
sobre el jardín
del deseo.