dijous, 31 d’octubre del 2019

El tenderete

Mueven los hilos del viento
voceadores del tiempo,
como hijos del Dios levantan
turbios dictados de ley
sufriendo las almas presas
el señalamiento injusto
de aquellas viles sazones
donde el rudo odio esclaviza.

Mueven los hilos al viento,
dolor por consentimiento.
Mueven, y mueven, y mueven,
y con la razón fallecen
con frialdad y enemistad,
calida diversidad.

Y ruego al crujir del viento.
Ruedo por el triste tiempo.